
Como dato adicional, los hermanos Ponce De León, pasaron lista de presente la mañana del 15 de noviembre de 1915 al inaugurarse el primer curso de la “Escuela Nacional de Aviación”, obteniendo años después, en 1918 el título de Teniente Piloto Aviador perteneciendo a la 1/a. generación de pilotos egresados de la E.M.A. “Escuela Militar de Aviación”.

Con tan solo 15 años de edad inició como Aprendiz Mecánico; un mes después, el 11 de Octubre del mismo año causó alta en el Ejército como Cadete en la E.M.A.
Su instructor de vuelo en la E.M.A. fue el Maestro Francisco Santarini, un destacado mecánico italiano que jamás había piloteado ningún avión. Daba teóricamente instrucciones a los Cadetes en tierra y hacia señales con banderas para dirigir las maniobras desde una motocicleta.
En la gráfica se observa en el aire a Alfonso Cruz Rivera piloteando un TNCA Serie “A” con motor Aztatl a punto de aterrizar. En motocicleta al instructor Francisco Santarini. Balbuena, 1920.
Sus prácticas de vuelo y vuelos de acrobacia las realizó en diversos aparatos Serie “A” hechos en los T.N.C.A. (Talleres Nacionales de Construcciones Aeronáuticas) equipados con motor “Aztatl” así como en Avro 504 K, Salmson, Sopwith Strutter, Morane - Moisant MS-35 y Ansaldo A-1 “Balilla”.
Se tituló el 11 de Febrero de 1922 como Teniente Piloto Aviador a la edad de 17 años, convirtiéndose en uno de los pilotos más jóvenes en la historia de la entonces Fuerza Aérea Nacional.
Pablo Sidar, Roberto Fierro, Gustavo León, Alfredo Lezama, David Borja y Luis Farell entre otros, fueron sus compañeros muy cercanos desde el inicio de su carrera.
Durante el período postrevolucionario de 1922 a 1929, el Teniente Alfonso Cruz Rivera prestó servicios en diferentes escuadrones y tomó parte activa como combatiente en diversas operaciones aéreas habiéndose destacado por su participación en las siguientes campañas: Rebelión Delahuertista 1923 - 1924, Rebelión Yaqui 1926 y Rebelión Escobarista 1929.
“Rebelión Delahuertista” 1923 - 1924
Tras el triunfo del Plan de Agua Prieta en el que se desconoce el gobierno de Venustiano Carranza, aunado a su muerte el 21 de Mayo de 1920, el ex Gobernador de Sonora Adolfo De La Huerta ocupó la Presidencia interina de la República apoyado por el Gral. Alvaro Obregón y el Gral. Plutarco E. Calles. De La Huerta ejerció el cargo del 1º de Junio de 1920 hasta el 30 de Noviembre del mismo año ya que el Gral. Obregón tomó posesión de la presidencia de la República un día después, el 1º de Diciembre de 1920.
El levantamiento iniciado por Adolfo de la Huerta se da dentro del período de elecciones presidenciales al final de la gestión del Gral. Obregón. A finales de 1923, De la Huerta se subleva en contra del Presidente Gral. Alvaro Obregón y de su candidato a la presidencia el Gral. Plutarco Elías Calles.
La situación se tornó extremadamente crítica debido a que junto con Adolfo de la Huerta, se sublevó aproximadamente el 60% del Ejército Nacional. Los delahuertistas se levantaron en armas en diferentes estados de la República a lo que el Presidente Obregón respondió militarmente utilizando Fuerzas Federales y a la Fuerza Aérea Nacional.

El Gral. Obregón, gran estratega militar que jamás conoció la derrota en batallas revolucionarias, estaba convencido de que la aviación le proporcionaría la ventaja de anticiparse a los movimientos de las tropas enemigas y rapidez en sus movilizaciones. De hecho, una vez iniciadas las hostilidades, tomó el mando del Ejército como Comandante Supremo y dirigió personalmente a la 3/a. Escuadrilla destacada en Irapuato, desde donde se lanzaban los vuelos de ataque durante 1923.
Justamente dentro de estos sucesos, el entonces Teniente Cruz Rivera, destacado en el Escuadrón de Caza, tomó parte activa como piloto combatiente en diversas operaciones aéreas y fue citado el 15 de Diciembre de 1923 para marchar con la 3/a. Escuadrilla bajo las órdenes del Mayor P.A. Comdte. Rafael Ponce de León y combatir en la campaña contra infidentes delahuertistas en los estados de Jalisco, Guanajuato y Michoacán.

La actuación de la Aviación Militar y en particular la de la 3/a. Escuadrilla durante la contienda fue muy destacada realizando actividades de exploración, bombardeo y ametrallamiento sobre tropas rebeldes .

Ocotlán, Yurécuaro, La Piedad, Pénjamo, Los Altos, Celaya, Yuriria, Morelia, San Francisco, Paradores, San Pedro, Ocotian, Mezcala, Teneria, Cerro Gordo, Concepción, Las Animas, El Fuerte, Luisito, Corralejo, San Gregorio, Sauceda, El Refugio, Tierra Blanca, Loreto, El Gusano, Santa Rosa, Sarabia, El Guajo, La Cal, Villaseñor, Soledad, Pueblo Nuevo, Ahuatlan, Zapotlán del Rey, Potrerillo, Juanacatlán, Zapotlanejo, Cajititlán, El Canastillo, Tololotlán, Paredones, Sebastianillo, Jacotepec y Colima.
Se destacan las siguientes misiones:
-Bombardeo al puente ferroviario de Ocotlán, Jal.
-Bombardeo al puente ferroviario en La Piedad Cabadas, Mich.
-Exploración y bombardeo a San Juan del Río, Qro.

“Yo sentía que al estallar las bombas no íbamos a alcanzar a salir pues los fragmentos nos alcanzarían; sin embargo, el Tte. Cruz Rivera maniobró y viró el avión de tal manera que se alejaba justo antes de la explosión”.
Como dato anecdótico el Gral. Obregón le recomendaba al Tte. Cruz Rivera “No sea loco Crucito, vuele bajito y despacito”. Es de llamar la atención el comentario del Gral. Obregón, puesto que refleja la concepción de la aviación que se tenía durante época.
Hubo incluso generales, quienes propusieron arrojar desde los aviones clavos para detener el avance de tropas rebeldes que montaban a caballo.
Del 15 de Marzo al 28 de Mayo de 1924, continuó la campaña contra infidentes delahuertistas en el Sureste de la República en el estado de Veracruz, lugar donde se había fraguado la insurrección y donde la contienda fue muy destacada.

-Ataque al tren de Durango.
-Exploración y bombardeo a Santiago Papasquiaro, Dgo.
-Exploración en Huajapan de León, Oax.
Durante los vuelos utilizó aviones Morane - Moisant. MS-35 “Parasol”, De Havilland DH-4B y Lincoln Standard.
Al finalizar la campaña, el Gral. Obregón altamente complacido por el éxito de la misma felicitó y elogió a los miembros de la Quinta Arma, habiendo girando instrucciones de ascenso para altos Jefes y pilotos que participaron en la campaña.
Por su brillante participación, el 4 de Febrero de 1924 el Tte. Alfonso Cruz Rivera recibió el grado de Capitán. 1/o. P.A. por “Méritos en Campaña”.
Al poco tiempo, en Septiembre de 1924 con tan solo 19 años de edad el Comandante de Escuadrilla Cap. 1/o. P.A. Alfonso Cruz Rivera recibió un diploma en “HONOR A LA PERICIA SOBRE EL DOMINIO DEL AIRE“ y fue reconocido por los Meritorios Servicios Prestados a la Patria en la Conquista del Aire. Dicho reconocimiento fue realizado por la revista de aeronáutica militar TOHTLI publicada por la E.M.A.

Esto produjo un acercamiento muy importante entre el Gral. Obregón y estos oficiales. Por tal motivo, los invitó a sembrar trigo en Cajeme, Sonora “Actualmente Ciudad Obregón” donde les obsequió unas tierras. El 14 de Julio de 1926 el Ex Presidente Alvaro Obregón le solicitó al Gral. de Div. Joaquín Amaro, el traslado del Comandante de Escuadrilla Alfonso Cruz Rivera, quien se encontraba destacado en la 4/a. Jefatura de Operaciones Militares, acordando su cambio de comisión a la 18/a. Jefatura de Operaciones Militares.

Como dato anecdótico, entre 1926 y 1929 surgió un conflicto armado, entre el gobierno de Plutarco E. Calles y milicias de religiosos católicos y presbíteros que resintieron la aplicación de la legislación enfocada a limitar la autonomía de la Iglesia Católica. Durante un largo periodo, las iglesias se mantuvieron cerradas, razón por la cual Refugio Pastrana Gorozave y Alfonso Cruz Rivera contrajeron nupcias en Nogales, Arizona, E.U.A. A dicho conflicto se le conoció como Guerra Cristera.
“Rebelión Yaqui” 1926
El 12 de Septiembre de 1926 el Gral. Alvaro Obregón que residía en Cajeme, Son. dedicado a actividades agrícolas; durante un viaje en ferrocarril, fue detenido por rebeldes yaquis. Se dirigía de Guaymas a su finca ubicada en Cajeme, Son., cuando el convoy fue detenido y rodeado por rebeldes en Vicam, Son. Tras su retención dentro del convoy, el Gral. Obregón pudo llegar a un acuerdo con la comisión de rebeldes; sin embargo, horas más tarde, llegaría un convoy al mando del Gral. Francisco Manzo repleto de tropas del Ejército Mexicano, quienes abrieron fuego en contra de los rebeldes, liberando al Ex Presidente.

“1928 Un año complejo”

Así mismo, el 12 de julio se suscitó el trágico accidente de su compañero y amigo el Capitán Emilio Carranza, quien falleció al estrellarse durante un viaje de “regreso” Nueva York – México “sin escalas”; el accidente ocurrió en New Jersey, E.U.A.
Como dato anecdótico, el Cap. Emilio Carranza y el Cap. Alfonso Cruz Rivera eran vecinos, vivían en apartamentos justo uno enfrente del otro y previo a su viaje de “ida” México – Washington cenó en la casa de Alfonso Cruz Rivera; ambos acompañados por sus esposas Refugio Pastrana de Cruz y Ma. Luisa Corbala de Carranza.
Los relatos del Gral. Cruz Rivera cuentan que durante la cena, Emilio dibujo en una servilleta un avión y comentó:
“Con este avión alcanzaré la gloria”
Tan solo días más tarde, en San Angel, México, el 17 de julio se produjo el asesinato del Gral. Alvaro Obregón con quien Alfonso Cruz Rivera sostuvo una relación muy cercana, de mucho aprecio y respeto.
Es importante destacar que al momento de su asesinato, el Gral. Obregón había resultado electo para ocupar la Presidencia de México por segunda ocasión por el período 1928 – 1932.
“Rebelión Escobarista” 1929
A mediados de 1928 en un momento de completa inestabilidad política e incertidumbre en el país, tras el reciente asesinato del Gral. Obregón y los recientes levantamientos yaquis y cristeros, surgió poco después en Marzo de 1929 un movimiento armado que apoyaba a José G. Escobar quien desconoció a Emilio Portes Gil como Presidente y estalló la Rebelión Escobarista.
Ante dicha situación, el Presidente de la República, Emilio Portes Gil, respondió designando como Secretario de Guerra y Marina al Gral. Plutarco E. Calles quien de inmediato diseñó la estrategia para hacer frente y acabar con el movimiento escobarista. Dicha estrategia incluyó el uso de tropas y fuerza aérea cuya participación fue muy eficaz y sobresaliente durante la campaña en donde la fuerza aérea se dividió en Escuadrillas. la 1/a. asignada al mando del Tte. Coronel Roberto Fierro Villalobos, la 2/a. asignada al mando del Tte. Coronel Pablo Sidar, la 3/a. asignada al mando del Cap. 1/o. Alfonso Cruz Rivera y la 4/a. asignada al mando de Cap. 1/o. Manuel Zayas Palafox.

Juntos intercambiaron conocimientos y se entrenaron mutuamente en el manejo de tipo de avión que piloteaban.

Durante la campaña y en específico en el ataque a Mina de Oro, Son. se registraron las bajas de los pilotos aviadores Jesús Gaona Abarca y Juan Gutiérrez Valladares pertenecientes a la 3/a. Escuadrilla quienes fueron muertos en combate. Su avión fue alcanzado por ráfagas de fuego proveniente de la artillería rebelde.
Se destaca una comisión que consistía en destruir un tren en movimiento que conducía tropas enemigas, en donde el Cap. 1/o. Cruz Rivera realizó una táctica de bombardeo en picado, operando a muy baja altura, en un vuelo con un ángulo de 50º logró colocar una bomba en mitad del tren, un blanco muy difícil de adquirir, habiéndolo hecho en una sola pasada y con una precisión impecable, cumpliendo a satisfacción la comisión.

Según el artículo de periódico “El Hispano Americano” de Mexicali, B.C., con fecha 18 de Abril de 1929: Piloteando un avión de una de las flotillas militares que el C. Gral. Rodríguez tiene a sus órdenes, arribó a esta el Cap. Cruz Rivera, procedente de Agua Prieta, habiendo bombardeado recientemente el campamento de los rebeldes sobre sus propios cuarteles. Resultando el avión que dirigía el bravo aviador, con 14 impactos de bala disparadas por el enemigo. Cabe señalar que dos de los impactos quedaron a escasos centímetros de su cuerpo, quedando las balas alojadas en su asiento.
Un hecho interesante es que el avión perteneciente a la 3/a. Escuadrilla piloteado por el Capitán 1/o. Cruz Rivera mostraba el símbolo de la entonces Fuerza Aérea Nacional apuntando hacia arriba; así mismo, se distinguía por llevar una cigüeña encima de un triángulo invertido dibujado en ambos costados del biplano; Insignia personal del Cap. 1/o. Cruz Rivera que sería utilizada por la Escuadrilla que comandaba.
La rebelión escobarista fue una campaña muy intensa en donde una vez más, la utilización de la fuerza aérea fue decisiva para acabar y someter el movimiento rebelde.
Por su brillante participación, el 16 d Mayo de 1929 el Cap. 1/o. Alfonso Cruz Rivera recibió el grado de Mayor P.A. por “Méritos en Campaña”. Además de un reconocimiento por parte del Gral. de Div. Jefe de la 2/a. Jef. de O. M. Abelardo L. Rodríguez quien lo destacó como un Jefe activo, enérgico y de iniciativa.
Derivado de la confianza y el respeto que el Mayor Cruz Rivera adquirió por parte del Gral. de Div. Abelardo L. Rodríguez. Años más tarde, el Gral. Rodríguez sería nombrado Presidente Substituto Constitucional de la República, habiendo llamado al Mayor Alfonso Cruz Rivera a formar parte de su Estado Mayor.
A finales de la década de los años veinte, durante 1928 y principios de los años treinta, surgió una época donde distinguidos pilotos aviadores realizaron diversos vuelos; algunos encontraron fama y reconocimiento personal, mientras que otros promovieron el desarrollo de a aviación civil sin obtener ningún reconocimiento personal.

Como se puede constatar en el artículo de periódico “El HERALDO”, con fecha 16 de Marzo de 1930: Durante los vuelos que realizó el Mayor Cruz Rivera fue detectando campos de aterrizaje apropiados; buscaba campos accesibles y sin obstáculos. En un viaje de inspección hasta la extremidad sur de la península, informó que a 200 Km. al sur de Mexicali, en las Minas de Azufre de San Felipe se encontraba en excelentes condiciones un magnífico campo de aterrizaje con suficiente amplitud para que en el pudieran levantarse los mas pesados aviones.
Afirmó que desde San Felipe hasta el Puerto de Santa Rosalía existe una distancia de 450 Km. en los que existen suficientes campos de emergencia destacando los de San Agustín, Chapala, Punta Prieta y Calmallí, siendo este último el que presenta más seguridades para los aterrizajes, además de existir aprovisionamiento de combustible y lubricantes.
En Santa Rosalía se encuentra un campo de regular extensión, que lo une con la ciudad a través de un camino de 8 Km. De ahí, a la cabecera del Distrito Sur, se encuentran los Puertos de Mulegé y Loreto y una serranía de 3500 pies de altura hasta llegar a La Paz que se encuentra en una amplia bahía de 80 Km. de longitud.
El Mayor Cruz Rivera afirmó que esta ruta en general ofrece seguridades para establecer en ella un servicio regular de pasaje y transporte, pues a lo largo de la costa se encuentran también numerosos sitios donde pueden hacerse aterrizajes de emergencia.
Posteriormente, dichos campos de aterrizaje serían de gran utilidad tanto para uso militar en la denominada Región del Pacifico durante la Segunda Guerra Mundial, como para el desarrollo de la aviación civil en el país.
Como dato adicional, el campo de aterrizaje en Santa Rosalía fue acondicionado por elementos del 5/o. Batallón de Infantería y posteriormente fue inaugurado por dos aviones que tripulaban el Mayor Alfonso Cruz Rivera y el Cap 2/o. Luis Boyer.
A lo largo de la historia de la aviación militar en México, se han realizado diversos vuelos trascendentales destacando entre otros los siguientes:
- Durante la Revolución Mexicana, el 14 de Abril de 1914, en la Bahía de Topolobampo, Sin. Gustavo Salinas Camiña lanzó bombas desde el avión “Sonora” sobre el buque de guerra huertista “Guerrero” que sostenía una batalla con el cañonero constitucionalista “Tampico”, convirtiéndose este episodio en el primer bombardeo aeronaval del mundo.
- En 1918 el Cap. Alfonso Virgen realizó el primer vuelo nocturno en México a bordo de un biplano T.N.C.A. “Serie A”.

- En Agosto de 1922 el Gral. Alvaro Obregón promovió una misión especial enviando una delegación mexicana a Brasil y Argentina, conformada entre otros por los pilotos Guillermo Ponce de León, Julián Nava Salinas y Francisco Espejel. Los pilotos mexicanos volaron en diversas ocasiones aviones Morane-Sauliner que llevaron desde México y participaron en la conmemoración del centenario de la Independencia de Brasil y posteriormente durante la toma de posesión del presidente Marcelo De Alvear en Buenos Aires.
- Años más tarde, en Agosto de 1927 los pilotos Alfredo Lezama Alvarez y David Borja Guajardo realizaron un vuelo sin escalas México-Nuevo Laredo, E.U.A. a bordo del avión LEFASE denominado “Puebla” habiendo recorrido 900Km.
- A finales de la década de los años veinte y principios de los años treinta, surgió una época donde distinguidos pilotos aviadores realizaron diversos vuelos; algunos con la intención de romper records, otros llevando saludos y mensajes de buena voluntad a países y repúblicas hermanas en Centroamérica, Cuba y Sudamérica. Así mismo, se realizaron vuelos mostrando bandera visitando las capitales de los estados de la República.
Se destacan los vuelos realizados por el Cap. Emilio Carranza, el Mayor Roberto Fierro Villalobos, el Tte. Cnel. Gustavo León González y el Cnel. Pablo Sidar, quienes encontraron fama, reconocimiento personal y desafortunadamente en algunos casos, la muerte.
- Por su parte, el Mayor Alfonso Cruz Rivera quien durante su asignación como Jefe de la Escuadrilla Militar en la Comandancia General de Campos en 1930 con base en la cabecera en Mexicali B.C. realizó diversos vuelos para la localización de campos de aterrizaje que eran de vital importancia tanto para efectos militares como para el desarrollo de la aviación civil.
Detectó campos de aterrizaje en las Minas de Azufre de San Felipe, Sta. Rosalía, así como campos de emergencia en San Agustín, Chapala, Punta Prieta y Calmallí.
Posteriormente, dichos campos de aterrizaje serían de gran utilidad tanto para uso militar en la denominada Región del Pacifico durante la Segunda Guerra Mundial, como para el desarrollo de la aviación civil en el país.

Como dato adicional, este se trató del primer vuelo en que la fuerza aérea operó en forma independiente al Ejército, a través de un Escuadrón que voló en formación al mando de un Piloto Aviador como su Comandante. Tras la primera o segunda parada durante el recorrido, el Cnel. Gustavo León González, quien lideraba el Escuadrón, presentó problemas estomacales lo que le impidió continuar al frente del mismo, por lo que le solicitó al Mayor Alfonso Cruz Rivera continuar con el trayecto. Después de haber recorrido parte del viaje y acorde al programa de vuelo, días después, se volvieron a encontrar y el Cnel. Gustavo León González retomó el mando del Escuadrón continuando con el recorrido a través de la República. Por su participación en dicho vuelo, el Mayor Cruz Rivera fue objeto de una Mención Honorífica.
- Una década después, en Mayo de 1940 el Cnel. Antonio Cárdenas Rodríguez, realizaría otro viaje trascendental realizando un vuelo de buena voluntad a bordo de un avión Lockheed 12 con el que recorrió diversos países de Centro, Sudamérica y el Caribe.
- Más tarde, en Abril de 1947 atendiendo una invitación especial por parte del gobierno de Brasil, la F.A.M. participó en la “Segunda Posta Aérea de las Américas”, donde el Cap. Rolando Rodríguez Fernández realizó un vuelo de acercamiento y buena voluntad a bordo de un avión TTB-AT7 habiendo recorrido la ruta México-Río de Janeiro-México. Dicho vuelo cerraría un ciclo dentro de la historia de la fuerza aérea puesto que fue la última vez según los registros que se tienen, en que se realizó un vuelo con el objeto de mostrar acercamiento y buena voluntad hacia países o repúblicas hermanas.
V. ESTADO MAYOR PRESIDENCIAL

Al terminar el período presidencial del Gral. Rodríguez, el Mayor Cruz Rivera fue ascendido a Tte. Coronel por “Hechos Meritorios” en servicio del Ejecutivo.
En la hoja de actuación formulada en el E.M.P. se le anota:
”Es un Jefe cumplido y disciplinado, muy competente en su arma y uno de los Jefes del Estado Mayor Presidencial que más se ha distinguido por su buena conducta civil y militar”.
Durante el transcurso de la década en 1935 el Tte. Coronel Alfonso Cruz Rivera retornó al 1/er. Regimiento Aéreo como 2/o. Comandante y poco después en el 2/o. Regimiento Aéreo ocupando el mismo cargo en el Campo Militar de Balbuena en México D.F.
Como dato anecdótico, los relatos del Gral, Cruz Rivera cuentan que en 1936 durante su asignación en el 2/o. Regimiento Aéreo, una mañana el Comandante del 2/o. Regimiento Aéreo el Coronel Alfredo Lezama en el trayecto rumbo a la base ordenó al chofer de su automóvil personal que se detuviera. En ese momento, un avión Corsario bajo su mando estaba aterrizando en el campo aéreo militar de Balbuena; Observó todo el proceso del aterrizaje y continuó su camino.
El oficial de guardia lo recibió con el Parte de Novedades y el Coronel Lezama le preguntó:
¿Quién pilotea el avión que acaba de aterrizar?
- El Tte. Coronel Cruz Rivera, contestó el oficial.
- ¡Que se reporte a mi oficina inmediatamente!.
Con la confianza que da una vieja amistad, el Tte. Coronel Cruz Rivera se presentó en la oficina del Coronel Lezama saludándole respetuosa y afectuosamente: A tus órdenes mi Coronel.
Con el ceño adusto y voz enérgica el Coronel Lezama se dirigió al Tte. Coronel Cruz Rivera: Preséntese en el campo de aterrizaje y haga un plantón de dos horas con la mirada fija en el chorizo (tubo de lona que se usa en los campos de aviación para indicar la dirección del viento) y repita “No debo aterrizar con el viento de cola exponiendo el material de vuelo y mi propia vida”.
A esa hora del día, el sol en la Ciudad de México era abrazador y el Teniente Coronel Cruz Rivera cumplió con el plantón disciplinario que le fue impuesto por la imprudencia cometida por un exceso de confianza que no se puede permitir en la aviación.
Al cumplir las dos horas del plantón, el Tte. Coronel Cruz Rivera se presentó a pasar lista y posteriormente ante el Coronel Lezama en su oficina. Saludando en posición de firmes: Cumplido el plantón mi Coronel. ¡No volverá a suceder!.
Esbozando una sonrisa, moviendo su cabeza el Coronel Lezama le contestó: Estoy seguro de eso Crucito, vamos a celebrarlo. Te invito a comer, pero antes, un aperitivo por tu cuenta…
Así mostraba su personalidad el Coronel Lezama; sabía combinar el afecto por un amigo con un alto sentido de responsabilidad y el Tte. Coronel Cruz Rivera correspondía a su gran amistad con respeto y disciplina que existió siempre entre ambos.
Tiempo después en 1937 el Tte. Coronel Cruz Rivera quedó destacado en la 2/a. Zona Militar como Inspector de Campos de Aterrizaje, habiendo recibido el grado de Coronel en 1939.
VI. “SEGUNDA GUERRA MUNDIAL” 1942 - 1945
A principios de los cuarentas, el mundo atravesaba por momentos muy complejos, la amenaza de guerra se hacia cada vez más latente. Después de una serie de dificultades entre los gobiernos de México y Alemania, el gobierno mexicano rompió relaciones con las potencias del Eje Alemania, Japón e Italia.
Aunque la posición de México se mantuvo neutral ante el estado de guerra, recibió amenazas, principalmente provenientes del gobierno Alemán.
Tras el hundimiento por submarinos alemanes de los barcos petroleros “Potrero del llano” y “Faja de Oro”, el Presidente Manuel Ávila Camacho declaró el estado de guerra entre México y los países del eje en Mayo de 1942.
El 1º de Junio de 1942, el Gral. Roberto Fierro Villalobos, Jefe de Aeronáutica Militar designó al Cnel. Alfonso Cruz Rivera como Comandante del 2/o. Regimiento Aéreo y fue enviado al Cuartel General de la Región Militar del Golfo en la Plaza de Veracruz, donde le fue asignada la vigilancia del Golfo de México, Mar Caribe e Istmo de Tehuantepec quedando al mando de los Escuadrones 3/o. 4/o. y 5/o. equipados con aviones “Vought Corsair” y “Consolidated 21-M” biplanos, monomotores y para dos plazas; armados con bombas de uso general y ametralladora. En los días subsecuentes y de manera gradual estos aviones serían remplazados por los AT-6B “North-American” monoplanos con similar armamento pero más modernos, maniobrables y veloces.

Como dato anecdótico, días después de que el Cnel. Cruz Rivera se hizo cargo del 2/o. Regimiento Aéreo, el 5 de Julio de 1942 el Mayor Luis Noriega Medrano salió del aeródromo militar de Tuxpan, Ver. al mando de dos AT-6B “North American” al recibir información proveniente de un avión civil mexicano sobre un avistamiento de un submarino enemigo, el cual fue atacado con bombas de uso general de 100 Lbs. El Mayor Noriega Medrano reportó a su regreso en su base, haber dañado al submarino.
Es importante señalar que lo que observó el Mayor Noriega después de su bombardeo, fue una mancha de aceite lo cual en ese momento significó que pudo haber hundido o dañado al submarino. “No hubo certificación de hechos”. Años después, se pudo confirmar que el ataque no provocó el hundimiento del submarino.
En los días y meses subsecuentes se registrarían los hundimientos de los petroleros “Tuxpan” (Americano), el 26 de Junio de 1942 a las 07:24, “Las Choapas” (Atlas), el 27 de Junio de 1942 a las 15:25, “Oaxaca” (Hameln), el 27 de Julio de 1942 frente a la costa de Corpus Christi en aguas estadounidenses y bajo responsabilidad de las fuerzas armadas de ese país, “Amatlan” (Vigor), el 4 de Septiembre de 1942 a las 04:30 fuera del horario de operaciones de los aviones de la fuerza aérea.
Dichos hundimientos se registraron en buques que navegaban sin escolta naval y/o protección aérea ó fuera del radio u horario operacional.
Con la declaración de estado de guerra de México a las potencias del eje y ante una inminente entrada a la guerra, con posible participación activa fuera del territorio nacional, se tomaron una serie de medidas: El Ex Presidente Gral. Lázaro Cárdenas quien se desempeñó como Comandante de la Región Militar del Pacífico, pasó a ocupar el puesto de Secretario de la Defensa Nacional. Al poco tiempo, se designó por segunda ocasión al Gral. Gustavo A. Salinas Camiña para dirigir a la fuerza aérea, como Jefe del Departamento de Aeronáutica Militar en substitución del Gral. Roberto Fierro Villalobos quien fue destituido del mando.


Es importante destacar que los aviones tipo AT-6B “North American” no eran adecuados para el tipo de servicios para los que fueron utilizados, debido a las condiciones meteorológicas y clase de misiones desempeñadas, pues efectuaron vuelos con un techo muy bajo y a distancia de la costa hasta de 100 millas mar adentro, sin contar con el equipo completo de salvavidas.
Las especificaciones de vuelo señalaban actividades tales como:
-Patrulla de Convoy
-Localización y Exploración
-Exploración y Vigilancia
-Localización y Vigilancia
-Vigilancia y Ruta
-Vigilancia costa y barcos
-Reconocimiento del terreno
Más tarde, durante 1944 se formó el Escuadrón 207 destacándolo en Ixtepec, Oax. sumándose al 2/o. Grupo de Escuadrones Aéreos. De esta manera el Cnel. Cruz Rivera mantenía bajo su mando cuatro Escuadrones.

El Cnel. Cruz Rivera Comandante del 2/o. Grupo de Escuadrones seleccionó a un grupo de pilotos y personal mecánico, que le fue requerido para dicho Grupo de Perfeccionamiento Aéreo. La unidad quedó integrada bajo el mando del Cnel. Antonio Cárdenas Rodríguez.

Por su parte, la misión del Cnel. Cruz Rivera con el mando del 2/o. Grupo de Escuadrones conformado por los Esc. 204, 205, 206 y 207 en el Golfo de México, Mar Caribe e Istmo de Tehuantepec, continúo durante todo el período de la Segunda Guerra Mundial.
En certificado de servicios formulado por la Región Militar del Golfo, a cargo del Gral. de Div. del Ejército Nacional Mexicano y Ex Presidente de México. Abelardo L. Rodríguez, se le anota lo siguiente al Cnel. Alfonso Cruz Rivera:
- Durante el tiempo de servicios desempeñó a satisfacción de la Comandancia de la Región Militar del Golfo todas las misiones que le fueron encomendadas, habiendo demostrado siempre buena conducta militar y civil, celo en el cumplimiento de su deber, amplia capacidad en asuntos de su profesión y mucho entusiasmo y diligencia en el servicio: cualidades que hicieron posible 9,976.04 Horas de Vuelo que efectuaron los elementos a sus ordenes habiendo vigilado y protegido 704 Viajes de Barco que transportaron aprox. 3’361,521 Toneladas de Combustibles, sin haberse registrado accidentes por imprevisión u omisiones, ni ataques del enemigo a los barcos encomendados a la vigilancia y protección de los aviones del Grupo de Escuadrones.
- El personal del 2/o. Regimiento Aéreo - 2/o. Grupo de Escuadrones Aéreos que comandó fue objeto de dos menciones honoríficas por parte de la S.E.D.E.N.A. Por su parte, el Cnel. Cruz Rivera recibió la Condecoración al Mérito Militar en 3/a. Clase en atención a sus méritos personales y distinguida actuación dentro del Instituto Armado.

Por su parte, el recién nombrado Gral. Brigadier Antonio Cárdenas Rodríguez Comandante de la F.A.E.M. que combatió en el lejano Oriente, al poco tiempo de su regreso a México, fue nombrado Director de Aeronáutica Militar. Posteriormente, por su reconocida competencia y aptitudes y por instrucciones del Gral. Cárdenas Rodríguez, el Cnel. Cruz Rivera fue relevado del mando del 2/o. Grupo de Escuadrones Aéreos con base en Las Bajadas, Veracruz y nombrado Subdirector Operativo de la Dirección de Aeronáutica Militar / Subjefe Operativo de la Fuerza Aérea Mexicana, otorgándole poco después el grado de General Brigadier.

Por su parte, Cruz Rivera lo hizo en misiones de protección y vigilancia en el Golfo de México, Mar Caribe e Istmo de Tehuantepec al mando del 2/o. Grupo de Escuadrones Aéreos compuesto por los Esc. 204, 205, 206 y 207 ante los alemanes, habiendo iniciado operaciones de guerra el 1º de Junio de 1942 y hasta el término del estado de guerra en México el 31 de Agosto de 1945, por lo que su participación en misiones de guerra fue de tres años y dos meses.
El Gral. Cruz Rivera acompañó al Gral. Cárdenas Rodríguez hasta el final de su gestión como Director de Aeronáutica Militar en Mayo de 1953. Durante este período, el Gral. Cruz Rivera adquirió un gran conocimiento de todo el personal de la fuerza aérea.
En la gráfica se observa en los extremos de la mesa al Gral. Antonio Cárdenas Rodríguez Jefe de la FAM y al Gral. Alfonso Cruz Rivera Subjefe de la FAM, en un homenaje a la FAEM a cargo del Gobierno de Japón, en donde el Sr. Koy Ciba Encargado de Negocios del mismo país rindió un emotivo discurso. Dicha ceremonia se llevó a cabo en 1952 en el Campo Militar de Balbuena.
VII. ¨RECORD DE VUELOS CERTIFICADOS¨

Práctica: 361 hrs. y 30 min.
Ruta: 160 hrs. y 35 min.
Campaña: 494 hrs. y 25 min.
Llama la atención que prácticamente el 50% de los vuelos realizados por el Teniente Coronel Alfonso Cruz Rivera fueron misiones en campaña como Comandante de Escuadrilla durante diversas rebeliones en los años veinte realizando acciones militares tales como localización, ametrallamiento y bombardeo sobre tropas rebeldes.
Dicha certificación tuvo el V/o. B/o. del Comandante del Departamento de Aeronáutica Militar, el Coronel Roberto Fierro Villalobos.
Años más tarde, después del período de la Segunda Guerra Mundial, la Dirección de Aeronáutica de la Secretaria de la Defensa Nacional certificó el Record de Vuelos del C. Coronel Piloto Aviador ALFONSO CRUZ RIVERA indicando un total acumulado de MIL QUINIENTAS SETENTA Y OCHO HORAS VEINTINUEVE MINUTOS como sigue:
Instrucción: 689.24
Ruta: 222.05
Campaña: 667.00
Los vuelos que realizó como Comandante del 2/o. Regimiento Aéreo que cambió su denominación a 2/o. Grupo de Escuadrones Aéreos en misiones de localización, exploración, reconocimiento, protección y vigilancia de convoyes marítimos nacionales y extranjeros que transportaron combustible en aguas del Golfo de México y Mar Caribe durante la Segunda Guerra Mundial, lo convierten en el piloto aviador en la Fuerza Aérea Mexicana con un número de horas de vuelo acumuladas específicamente “en campaña”, no superado por nadie hasta el momento de su retiro.
Dicha certificación tuvo el V/o. B/o. del Coronel P.A. Subdirector Administrativo de la Dirección de Aeronáutica Militar, Eliseo Martín del Campo G.
En Octubre de 1963 el Gral. de Div. Alfonso Cruz Rivera fue reconocido y autorizado, a portar “Alas de Piloto Aviador con Estrella y Laureles” en virtud de tener acumuladas más de 3000 horas de vuelo en aeronaves militares.
Dicha certificación fue otorgada por el Gral. de Div. P.A. Roberto Fierro Villalobos Jefe de la F.A.M.
Durante su larga carrera militar el Gral. Alfonso Cruz Rivera se destacó por ser un militar de fuerza aérea con perfil 100% operativo. Siempre fiel a su arma y en busca del desarrollo y evolución de la F.A.M.
VIII. ORIGENES DEL PLAN DN-III E. PARTICIPACIÓN DE LA FUERZA AÉREA MEXICANA EN APOYO A LA POBLACIÓN CIVIL



Dicho PLAN DN-III E ha permanecido vigente a través de los años.
IX. HOMENAJE AL MAESTRO FRANCISCO SANTARINI

Por acuerdo presidencial, le fue concedida la condecoración “Al Mérito Aeronáutico” de 1/a. Clase por su meritoria labor en favor de la fundación de la aviación militar mexicana.

Tras la ceremonia y el brindis, se llevó a cabo una celebración en los hangares del 1/er. Regimiento Aéreo en donde asistieron entre otros, los Generales Aureo L. Calles, Antonio Cárdenas Rodríguez, Gilberto R. Limón y Alfonso Cruz Rivera.
X. INAUGURACION DE LA BAM No. UNO EN SANTA LUCIA Y CLAUSURA DEL CAMPO MILITAR DE BALBUENA

El 24 de Noviembre de 1952 Siendo Jefe de la F.A.M. el Gral. Antonio Cárdenas Rodríguez, Subjefe Operativo de la F.A.M. el Gral. Alfonso Cruz Rivera y Subjefe Administrativo de la F.A.M. el Gral. Eliseo Martín del Campo, días antes de que el Lic. Miguel Alemán terminara su gestión como Presidente de la República, inauguró las instalaciones de la Base Aérea de Sta. Lucía en el Estado de México. (FOTO: Archivo del Gral. Martín del Campo)
Días más tarde el 6 de Diciembre del mismo año, se llevó a cabo una serie de ceremonias para clausurar de manera definitiva el Campo Militar de Balbuena, lugar que vio nacer la Aviación Militar Mexicana. El 7 de Diciembre de 1952 despegó la última nave militar, un avión C-47 al servicio del Jefe de la FAM con destino a Santa Lucía. El Comandante de dicho vuelo fue el Gral. Antonio Cárdenas Rodríguez acompañado del Gral. Alfonso Cruz Rivera, trayendo a bordo invitados distinguidos.

Tras problemas de salud del Gral. Alberto Vieytez y Vieytez quien ocupó el cargo de Jefe de la Fuerza Aérea Mexicana del 3 de Junio de 1953 al 29 de Abril de 1955, el Gral. Alfredo Lezama Alvarez junto con el Gral. Alfonso Cruz Rivera, estaban postulados para dirigir la F.A.M. Al Gral. Lezama Alvarez lo apoyaba el Secretario de la Defensa Nacional, Gral. Matías Ramos Santos, mientras que al Gral. Cruz Rivera lo apoyaba el Jefe del Estado Mayor Presidencial, Gral. Alejandro Hernández Bermúdez; Finalmente, el 29 de Abril de 1955 el Presidente de la República Adolfo Ruíz Cortines nombró Jefe de la F.A.M. al Gral. Alfonso Cruz Rivera.

Es importante señalar que la fuerza aérea no atravesaba uno de sus mejores momentos. Reducida (Alrededor de 30 aviones operativos), obsoleta (La mayoría de sus aviones provenían de aviones adquiridos durante la pasada Guerra Mundial) y descuidada; con escasos recursos y grandes necesidades, con poco interés para recuperarla por el alto costo que esto significaba y el desinterés del alto mando del Ejército por aumentar el presupuesto de la fuerza aérea en detrimento de las unidades de tierra, lo que obligó al Gral. Cruz Rivera a presentar un plan de recuperación congruente con la situación económica del estado mexicano y la actualización de la F.A.M.
Las columnas en que sostuvo su plan integral fueron:
1) La autonomía de la F.A.M. para tener mayor poder de decisión.
2) Poner en servicio más material de vuelo al menor costo posible.
3) Renovar los mandos:
Para realizar sus proyectos eran necesarios jefes con determinados perfiles, con criterios afines y firme determinación.
4) Abrir el escalafón para evitar congestionamiento y dar oportunidad de escalar puestos a nuevos jefes con merecimientos.

En noviembre de 1955 se llevó a cabo un debate en el Senado de la República con respecto a la posibilidad y conveniencia de crear la Secretaría del Aire. Sin embargo, fue la primera y última vez que este tema se trato a tan alto nivel político y pese a la negativa a la propuesta, este fue un tema que se especuló durante mucho tiempo.
Dicha propuesta encontró fuerte oposición para su realización. Se presentaron argumentos inconvenientes en cuanto a su operación y administración, pues se rompería la coordinación entre cuerpos de tierra y aire en operaciones militares ordenadas por la S.E.D.E.N.A., a esto había que agregar un alto gravamen al presupuesto de la nación; sin embargo, se aceptaron algunas sugerencias para la Ley Orgánica de la F.A.M.
Así mismo, con un Presidente austero y con la determinación de no hacer gastos que consideraba innecesarios, el alto mando del Ejército compuesto en su mayoría por generales que procedían de armas de tierra “Caballería, Infantería, etc.” que ocupaban los puestos de mayor jerarquía dentro de la S.E.D.E.N.A., no existían posibilidades de lograr la Secretaría del Aire.
Por tal motivo el Gral. Cruz Rivera presentó al Presidente de la República Adolfo Ruíz Cortines, por conducto del Jefe del Estado Mayor Presidencial, Gral. Hernández Bermúdez la problemática de la F.A.M. y sus propuestas de solución.

La mayor parte de su presupuesto, sueldos y asignaciones que representaba el 91.43% eran manejados por la Secretaría de Hacienda a través de su pagadores. Únicamente $197,000 anuales para la Compra de Bienes para Administración (Material de Fotografía y Cine, Material Eléctrico, Material para Talleres, Bibliotecas y Herramientas) los controlaba directamente la Jefatura de la F.A.M., bajo la supervisión y auditoría de la Comisión Inspectora del Ejército.
Pocos y limitados recursos para el propósito del Gral. Cruz Rivera de poner en servicio más material de vuelo. Sin embargo; al enterarse que la presidencia había aprobado la compra de un número reducido de helicópteros y contando con el apoyo del Jefe del Estado Mayor Presidencial Gral. Hernández Bermúdez, logró que el Presidente de la República ordenara que se cancelaran las órdenes de compra de los helicópteros y se asignara su importe a la compra de refacciones y material para realizar el Plan de Recuperación, proyecto propuesto por el Gral. Alfonso Cruz Rivera que aunque con cierto escepticismo pero ante la posibilidad de ver 130 aviones en el aire se decidió apoyarlo.
Con el logro de esta opción le fue más fácil al Gral. Cruz Rivera convencer al Presidente de la República de hacer cambios en los altos mandos de la F.A.M. venciendo cierta resistencia de algunos generales del Ejército; de esta manera nombró como Subjefe de la F.A.M. al Gral. Rafael Suárez Peralta; hizo cambios de Jefes de Escuadrones, Talleres del 4/o. Escalón de Mantenimiento en donde nombró al Cnel. Juan José Sisto del Río como Jefe del mismo, auxiliado por el Cap. Ing. en Aeronáutica Salvador Urdiain, colocando al personal con el perfil adecuado en cada caso y renunciando a compromisos de amistad con antiguos compañeros que estaban atorando el escalafón, impidiendo que nuevos jefes ocuparan nuevos puestos de mando; quitándoles la oportunidad de progreso personal y de aportar nuevas ideas y actitudes en beneficio de la F.A.M., que se trata de un arma que está en constante desarrollo y requiere de una constante actualización, lo cual era imposible lograr repartiendo los mandos de la F.A.M. por razones de amistad.
Esto colocó al Gral. Cruz Rivera ante una coyuntura:
a) Repartir la fuerza aérea entre sus amigos contemporáneos.
b) Poner los mandos de la fuerza aérea entre jefes jóvenes con nuevas ideas y con metas razonables para el futuro.
Este tercer y último objetivo le produjo enemistades y resentimiento de algunos altos jefes que pensaban que su antigüedad y amistad les garantizaba puestos de mando importantes dentro de la F.A.M.
Hubo sin embargo, excepciones. Entre otros, el Gral. Alfredo Lezama Alvarez quien intervino en la entrega del mando y el Gral. Luis Farell Cubillas, entendieron su postura y le confirmaron su amistad.
PLAN DE RECUPERACION
A dos meses de haber tomado posesión de la Jefatura de la F.A.M., en Junio de 1955 los Campos Militares de Aviación, cambiaron su denominación a la de Bases Aéreas Militares seguida de un número y del nombre del lugar donde se encuentra ubicada.
Una vez reorganizados los mandos y conforme se fueron recibiendo refacciones se fue enviando a las Bases Aéreas material para reparar en las propias bases aviones que solo necesitaban algunas refacciones para quedar en condiciones de vuelo. De tal manera que una vez reparadas todas las unidades, estas se concentraron en el Aeropuerto Central de la Ciudad de México, logrando que 60 aviones volaran durante el desfile militar del 16 de Septiembre de 1955.
Con sorpresa y satisfacción, el Presidente de la República presenció la formación al mando del Gral. José Guadalupe Vergara Ahumada Comandante del Escuadrón de Transportes y Líder General de la Formación.
De esta manera se dio el primer paso para la rehabilitación de la F.A.M. dejando satisfecho al Sr. Presidente.

La orden: Recuperar 30 aviones AT-6, 20 aviones AT-11, 3 P-47, 1 C-47 y 1 B-25.
Durante el proceso se reacondicionaron los talleres de maquinaria, soldadura, fuselajes y accesorios, superficies de control, laministería, carpintería, modelos y vestiduría.
En una demostración de liderazgo, carácter, disciplina y trabajo en equipo, la fuerza aérea lograría un hecho histórico en la recuperación de su fuerza operativa, sin depender de recursos económicos, con el esfuerzo y la disciplina en equipo y evidentemente, por el gran respeto ganado por el Gral. Cruz Rivera ante todos sus subordinados.
Con este reacondicionamiento se logró aumentar en un 40% el rendimiento de trabajo, lo que permitió una recuperación de 55 aviones que se encontraban dados de baja como material de deshecho a través de un proceso que duraría dos años y seis meses.

El proceso del Plan de Recuperación continuó durante 1956 arrojando los siguientes frutos: 81 aviones en desfile militar habiendo recibido la estimulante visita del Jefe del Estado Mayor Presidencial Gral. de Div. Hernández Bermúdez quien durante la misma, externó al Gral. Cruz Rivera su satisfacción por el resultado obtenido en la recuperación del material de vuelo.
Un año más tarde, en 1957 el proceso del Plan de Recuperación se mantenía arrojando resultados: 92 aviones en desfile militar. En esta ocasión fue el Secretario de la Defensa Nacional Gral. de Div. Matías Ramos Santos quien asistió e inspeccionó personalmente los equipos de vuelo, de hecho, realizó un vuelo a bordo de uno de los C-47 previo al inicio de las maniobras del desfile militar de 1957. Durante su visita felicitó sinceramente al Gral. Cruz Rivera por el éxito logrado en la recuperación de material de vuelo.


El 16 de Septiembre de 1958 fue el último desfile que presenció el Presidente de la República Adolfo Ruíz Cortines. Con una formación sin precedentes, “incluso a la fecha” conformada por más de 140 aviones, que surcaron los cielos de la Ciudad de México haciendo rugir sus motores, “Cambiando el Paso” sobre el Balcón Presidencial para saludar al pueblo de México asistente al Zócalo y agradecer al Presidente el apoyo y la confianza que les brindó para su recuperación; que se hacía evidente con tal demostración.
Nota: Cambiar el paso significa revolucionar el motor de los aviones en vuelo, generando más ruido, lo que se considera un saludo en vuelo hacia el Balcón Presidencial.
La Parada Aérea dio inicio sobre el Zócalo, justo en el momento en que el Presidente de la República Adolfo Ruíz Cortines, quien desde el Balcón Presidencial saludaba a la columna del desfile, cuando se escuchó el violento estruendo de un Escuadrón conformado por 6 aviones de reciente adquisición T-28A “Trojan” realizando un vuelo rasante a máxima velocidad, seguido del Escuadrón Aéreo de Transportes conformado por 7 aviones C-47 que hacían su aparición a mayor altura y en perfecta formación.
Acto seguido, aparecen detrás de los C-47 dos Escuadrones de AT-11“Beechcraft” conformados por 21 aviones, cuando al mismo tiempo y por debajo de ellos apareció una Escuadrilla de aviones AT-6 “North American” en vuelo rasante y a máxima velocidad.
El cuerpo de la formación estaba conformado por diversos Escuadrones volando en Escuadrilla. 62 aviones AT-6 “North American” recién recuperados hacían su aparición realizando diversas formaciones. Justo después hizo su aparición en vuelo rasante y a máxima velocidad otro Escuadrón conformado por 6 aviones más del tipo T-28.
Finalmente, cerrando la brillante exhibición, hicieron su aparición 2 aviones “Thunderbolt” P-47 pertenecientes al glorioso Escuadrón de Pelea 201.
Aviones C-47 pertenecientes al Escuadrón Aéreo de Transportes en perfecta formación.
Escuadrilla de Aviones AT-11 en formación en “V”.
Escuadrón de aviones AT-6 dirigiéndose al área de reunión general.
Los aviones T-28 de reciente adquisición.
Aviones P-47 pertenecientes al Histórico Escuadrón de Pelea 201.
Después de la última pasada sobre el Zócalo, para culminar el espectáculo aéreo; otra exhibición sin precedentes: Aparecen 33 aviones AT-6 ¨North American¨ formando las siglas de la F.A.M. llamando la atención de los presentes. Nota: Dicha formación no se ha vuelto a repetir desde 1958.
La formación F.A.M. fue echada a volar por el Gral. de Bgda. Alfonso Cruz Rivera Jefe de la F.A.M. como gesto de agradecimiento al Presidente de la República Adolfo Ruiz Cortines por el apoyo y la confianza que les brindó durante el proceso de recuperación de material de vuelo, habiendo cumplido al Presidente la promesa que le había hecho de lograr tan difícil objetivo en tan solo dos años y medio.
Al día siguiente, el Presidente Adolfo Ruíz Cortines, en otro acto sin precedentes, invitó a al Gral. Alfonso Cruz Rivera y al alto mando de la F.A.M. a presentarse en Palacio Nacional en donde los recibió para felicitarlos personalmente por su brillante actuación.
Es importante destacar que esta ocasión fue la primera vez en la historia en que un Presidente invitó a un Comandante de Fuerza Aérea y a su alto mando a presentarse en Palacio Nacional.
Así mismo, el Gral. Cruz Rivera recibió una felicitación por parte del Director General de Aeronáutica Civil Gral. de Div. Alberto Salinas Carranza, pionero de la aviación en México, por tan brillante exhibición.

El 1° de Noviembre de 1958 por acuerdo presidencial el Gral. de Brigada Alfonso Cruz Rivera, recibió el grado de Gral. de División Piloto Aviador y fue ratificado en el puesto continuando como Jefe de la F.A.M. habiendo recibido una felicitación por parte del Ejecutivo por su valiosa colaboración.
No obstante lo anterior el Gral. Cruz Rivera advirtió que a pesar de los logros y avances obtenidos, había mucho que hacer por la F.A.M.

Así mismo, presentó un Plan Integral de Actualización que contemplaba la adquisición de aviones propulsados a reacción “Jet’s”, sin embargo, la Presidencia de la República consideró que por su complejidad correspondía al próximo gobierno, el cual estaba por tomar posesión, atender en su caso, pues la actual administración no tenía tiempo para estudiarlo, valorizarlo y ejecutarlo.
Por su parte el Gral. Cruz Rivera quedó con la convicción de que este plan era viable, únicamente se necesitaba la voluntad de ejecutarlo, pues tenía la materia prima que era el personal de la F.A.M. a quien había logrado conocer y desarrollar ampliamente a través de la experiencia del mando directo por cerca de veinte años.
ESCUELA MILITAR DE AVIACION/COLEGIO DEL AIRE
El 24 de Noviembre de 1951, el Presidente de la República, Lic. Miguel Alemán encabezó la ceremonia de inauguración de la Base Aérea Militar de Zapopan y las instalaciones de la EMA ubicadas en la misma. Acompañaron al Jefe del Ejecutivo, el Gral. de Div. Gilberto R. Limón, Secretario de la Defensa Nacional, el Jefe de la FAM, Gral. Antonio Cárdenas Rodríguez y Subjefe Operativo de la FAM el Gral. Alfonso Cruz Rivera.
Años después, durante la gestión del Gral. Alfonso Cruz Rivera como Jefe de la Fuerza Aérea Mexicana del 29 de Abril 1955 al 1º de Abril de 1959, se amplió y mejoraron las instalaciones de la EMA en la entonces denominada BAM No. 2 en Zapopan, Jal. habiéndola dotado de aviones de entrenamiento Boeing Stearman PT-13D Kaydet y PT-17. Así como de aviones producto del Plan de Recuperación del tipo AT-6 “North American” que sirvieron para entrenamiento de generaciones de cadetes.
Durante 1959 se integraron la EMA Escuela Militar de Aviación, la Escuela de Meteorología y la Escuela de Mecánicos, constituyendo el plantel educativo rector en educación militar aérea de México Colegio del Aire, el cual fue inaugurado el 22 de agosto de 1959 por su predecesor, el Gral. Roberto Fierro Villalobos.
Como dato adicional, la BAM No. 2 en Zapopan, Jal. en una reestructuración de bases aéreas que realizó la FAM se le denominó BAM No. 5 durante 1985.
ELECCIONES POR CAMBIO DE GOBIERNO E INCIDENTE CON GUATEMALA

Satisfecho por los logros alcanzados durante su carrera militar y por haber cumplido con todas las comisiones que se le encomendaron durante el recorrido por todos los escalones de mando de su época, con la única excepción de La Dirección de la E.M.A. el Gral. Cruz Rivera, jamás imaginó que la culminación de su gestión al frente de la F.A.M. se vería empañada por escandalosos y sistemáticos infundios que aparecieron durante el último trimestre de 1958 y que por la época en la que fueron difundidos “elecciones por cambio de gobierno” era evidente que trataban de desprestigiarlo para propiciar su destitución.
Eventos desafortunados y ciertas circunstancias ajenas al Gral. Cruz Rivera se aprovecharon para circular rumores en su contra.
Alteraciones en la nómina de la pagaduría de la F.A.M. fueron descubiertas y el escándalo lo alcanzó por un mal manejo de la información que de manera dolosa se propagó, hasta que la investigación correspondiente lo exoneró de toda culpa y acalló el rumor. Sin embargo, continuó el plan de desprestigio con la aparición de algunos artículos de prensa dirigidos, donde le atribuían supuestas propiedades que no se señalaban concretamente por la sencilla razón de que no existían; pero se sugería que eran producto de sus malos manejos con la gasolina y con fondos provenientes del Plan de Recuperación, lo cual resultaba absurdo pues el Gral. Cruz Rivera en algunas ocasiones puso a disposición de la S.E.D.E.N.A. sobrantes de gasolina durante el ejercicio, pidiendo a cambio refacciones y equipos de radio para los aviones. Por otra parte, el Plan de Recuperación estuvo supervisado por la Comisión Inspectora del Ejército y los pagos los hizo la Dirección General de Intendencia a cargo del Gral. Sánchez Acevedo y el Gral. Badillo Vizarra quienes fueron los encargados de manejar los fondos del Plan de Recuperación, quedando a cargo del Gral. Cruz Rivera, únicamente la parte operativa y el gasto correspondiente al escaso presupuesto de la F.A.M.

El ataque arrojó un saldo de 3 muertos y 14 heridos.
OPERACION GAVIOTA
Tras el legítimo aunque desmedido ataque, de inmediato la F.A.M. al mando del Gral. de Div. Alfonso Cruz Rivera alistó alrededor de 60 aviones y se diseñó un plan de ataque en conjunto con los diferentes Jefes de Escuadrones para responder la agresión. A dicho plan de ataque se le denominó OPERACION GAVIOTA.
Los aviones que consideraba la operación eran del tipo C-47, Stinson LZS-5, AT-6, T-28 y P-47.
Nota: A continuación se muestra una cita que se obtuvo de la obra FUERZA AEREA MEXICANA Una Travesía Histórica Publicada por Alfredo Macías Narro. México, Octubre de 2013 / Cita del autor. Entrevista en el domicilio particular con el Gral. de Div. FAPA Rolando Rodríguez Fernández en el mes de enero de 1979.
En palabras del Gral. de Div. Rolando Rodríguez Fernández, quien durante el incidente con Guatemala estaba a cargo como Jefe de Escuadrón de una escuadrilla de aviones AT-6 citó lo siguiente:
“… El ‘Control de Misión’ correría a cargo del mando a bordo de un C-47,volando ‘hipódromos’(en círculos) sobre el área de blancos; la ‘Observación de Campo’ y ‘Marcado de blancos’ estaría a cargo de 2 Stinson LZS-5; el ‘Reconocimiento Fotográfico’ previo al ataque, así como el posterior para el análisis de efectividad de resultados, correría a cargo del ‘Bicho’ de fotografía (Beechcraft C-45F, avión insignia del EARF, al mando de su comandante, el Mayor FAPA Alfredo Macías Jaime) (…) los (primeros) T-28 iban a servir más como señuelo, para atraer al aire a los “Mustang” guatemaltecos; iban unos artillados con ametralladoras (Colt-Browning Cal. 0.50) y otros con bombas de fragmentación de 100lbs. (…) el objetivo era bombardear (los North American T-28A) ‘La Aurora’ (el aeropuerto de la capital chapina y principal base de su fuerza aérea), para inutilizar el principal aeropuerto de Guatemala y dificultar el aterrizaje ahí de los P-51 al retorno de su eventual misión de persecución a los T-28 ‘bombarderos’ (1/a oleada).
Los T-28 ‘artilleros’ y los P-47D (2/a oleada), se ocuparían de ‘perseguir a los perseguidores’ (…) entonces los AT-6 ‘bombarderos’ con sus bombas de fragmentación de 100 lbs. entrarían en vuelo rasante desde el Pacífico para atacar las 3 ó 4 bases de dispersión a los que se habían destinado los ‘Mustang’ (…) el ataque rasante de los AT-6 no encontraría, de hecho, oposición aérea y de inmediato regresarían a territorio nacional, donde les aguardaba una amplia cobertura de fuego antiaéreo (…) los pilotos guatemaltecos (tal vez) carecían de la experiencia de combate de los más de 30 veteranos del 201 (el EAP-201) que se tendrian en el aire, en las diversas unidades (…) si no eran derribados (los aviones de la F.A.G.) en combate de persecución por nuestros aviones, serían hostigados por el fuego antiaéreo (mexicano) y, finalmente, no encontrarían a su retorno un solo campo de aterrizaje en buen estado (en su territorio, se entiende), ni combustible para recargar…”
No obstante lo anterior, dicho ataque jamás se ejecutó y la F.A.M. no respondió la agresión. Se sugiere que el Presidente de México entrante Lic. Adolfo López Mateos con menos de un mes en el cargo y con la gran responsabilidad en ese momento de ser el presidente del "País líder de la Organización de Estados Americanos (OEA)", no agredería a una república hermana por obvios motivos y repercusiones políticas, por lo que al incidente se le dio una salida diplomática.
Por otra parte, las críticas de personal militar y opinión pública se concentraron en el Gral. Cruz Rivera responsabilizándolo de no artillar los aviones recuperados, ignorando las circunstancias que le impidieron equipar a la fuerza aérea con aviones de combate modernos y los motivos para no responder al ataque guatemalteco.
Para agravar aún más la situación, una corriente de antipatía entre el Gral. Alfonso Cruz Rivera y el Gral. José Gómez Huerta nuevo Jefe del Estado Mayor Presidencial se hizo patente de inmediato. Evidentemente sus propósitos no coincidían. Además, existían fuertes rumores y una campaña de prensa recomendando el nombramiento del Gral. de Div. P.A. Roberto Fierro Villalobos, quien no obstante haber estado alejado de la F.A.M. por más de dieciséis años; desde su remoción de mando en plena Segunda Guerra Mundial en 1942, hasta su designación nuevamente como Jefe de la fuerza aérea; lo cual representó una brecha de desconocimiento de pilotos y personal de la fuerza aérea; Así mismo, planes, propuestas y proyectos de desarrollo de Jefes, Oficiales e incluso de la misma F.A.M. que se venían trabajando, se vieron afectados y en algunos casos truncados.
Con el objeto de contrarrestar dicha situación y afrontar el compromiso, el Gral. Fierro Villalobos requería de personal leal y de toda su confianza para sus propósitos, por lo que designó como Subjefe de la F.A.M. al Gral. de Bgda. Luis Farell Cubillas quien además de ser una persona muy preparada, tenía reconocidos dotes como organizador. Así mismo, designó al Gral. de Bgda. Alfredo Lezama Alvarez destacado por su don de mando como Comandante de la Base Aérea Militar No. Uno en Sta. Lucía.
Todos ellos cultivaron una estrecha amistad con el Gral. Alfonso Cruz Rivera desde el inicio de sus carreras y él correspondió esa gran amistad con una respetuosa distancia.

Al entregar la Jefatura de la fuerza aérea al Gral. Roberto Fierro Villalobos, en Abril de 1959, el Gral. de Div. Agustín Olachea, nuevo Secretario de la Defensa Nacional, le pidió al Gral. Alfonso Cruz Rivera servir como su asesor personal en asuntos de aviación por su vasta experiencia y destacada labor al frente de la F.A.M. y como uno de los primeros actos fue entablar un debate con el Gral. Fierro Villalobos y otros altos Jefes en la fuerza aérea sobre distintos temas. El Gral. Cruz Rivera participó en dos o tres debates sin embargo, le pidió al Gral. Olachea que lo quitara de esa comisión pues el no quería interferir y debatir diversos tópicos con los cuales no estaba de acuerdo y le pidió que le permitiera retirarse de esos debates, por lo que solicitó su traslado a la 15/a. Zona Militar en Guadalajara, Jal.

En los E.U.A. los Canberras fueron manufacturados bajo licencia de la compañía “Martin” como B-57 en diferentes versiones.

Años más tarde, siendo Jefe de la F.A.M. el Gral. Alberto Vieytez y Vieytez, durante 1954 se llevaron a cabo diversas exhibiciones en México, Centro y Sudamérica por parte del gobierno de los E.U.A. a través de su fuerza aérea en donde aparatos tales como: F-84, T-33 y F-86 “Sabre” fueron mostrados con fines de propaganda para venta de aeronaves y para mostrar su poderío militar.



En México dicha exhibición se realizó en el Aeropuerto Central de la Ciudad de México.

La utilización de aviones propulsados a reacción “Jet’s” era una realidad. En dicho ejercicio se utilizaron aparatos a reacción “Jets” tales como F-100 “Super Sabre”, RF-84F y T-33.
Como dato adicional, las operaciones durante los Ejercicios Militares estuvieron apoyadas por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos de Norteamérica y unidades aéreas de los Marines, involucrando alrededor de 10,000 tropas, 200 equipos aéreos y 34 barcos del NAVY.

En lo que respecta a las pistas de aterrizaje, estas se encontraban totalmente asfaltadas y contaban con toda la tecnología de seguridad disponible.
Para la vigilancia de las instalaciones, así como para el control y dirección de los aviones “Jet’s” a su objetivo en el aire, disponían de radares de corto y mediano alcance, además del equipo adicional electrónico BID (Búsqueda-Intercepción-Dirección), indispensable para el control directo de los aviones en vuelo.
E

De hecho hubo algunos pilotos cubanos que en un programa de entrenamiento avanzado volaron el Cessna T-37 “Tweet” mientras que otros volaron el North American F-86 “Sabre”.
Los viajes que realizó el Gral. Alfonso Cruz Rivera al extranjero en calidad de Subjefe de la F.A.M., así como los que realizó posteriormente como Jefe de la F.A.M. le permitieron concluir que nuestro nivel mostraba un retraso notable, en cuanto a la evolución y desarrollo de la fuerza aérea tanto en estructura como en aparatos de vuelo en comparación a otros países, por lo que consideraba necesario modernizar y actualizar a la F.A.M. basado en las circunstancias y necesidades del país.

Desde finales de la década de los cincuentas se discutía en México la posibilidad de adquirir aparatos propulsados a reacción “Jet’s”, el Gral. Cruz Rivera tenía contemplados aviones T-33 ¨Lockheed¨ como primera opción para la F.A.M., sin embargo, no solo bastaba con adquirir nuevas y modernas aeronaves. Era indispensable un Plan Integral de Actualización que permitiera el uso adecuado de dichos aparatos, por lo que el Gral. Cruz Rivera advirtió al Presidente de la República Adolfo Ruíz Cortines sobre estas necesidades.
- Pistas de aterrizaje en las bases aéreas militares asfaltadas y que contaran con tecnología de barredoras, por lo que había que adaptarlas para permitir la operación adecuada de aparatos propulsados a reacción “Jet’s”.
- Pistas de aterrizaje acondicionadas con barreras de seguridad con el objeto de detener aquellos aviones que por diversas circunstancias hayan llegado al extremo de la pista con velocidades no mayores de 45 nudos.
- No utilización de aparatos propulsados a reacción “Jet’s” en el Aeropuerto Central de la Ciudad de México.
- Hangares apropiados para proteger las nuevas unidades de las inclemencias del clima, actualización de herramientas y talleres de mantenimiento en todos los escalones.
- Capacitación de personal de mecánicos y pilotos.


XIII. LOS SESENTAS
Durante la década el Gral. Alfonso Cruz Rivera se encontraba a disposición de la Dirección General de Personal, agregado al Cuartel General de la 15/a. Zona Militar en Guadalajara, Jal.
El 1º de Octubre de 1963 el Gral. de Div. Alfonso Cruz Rivera fue reconocido y autorizado, a portar “Alas de Piloto Aviador con Estrella y Laureles” en virtud de tener acumuladas más de 3000 horas de vuelo en aeronaves militares.
El Gral. Cruz Rivera participó en diversas ceremonias, inauguró instalaciones, tomó protesta y juramento de bandera a Jefes bajo orden presidencial.
La última nota como miembro activo que se obtuvo del Gral. Cruz Rivera data del año 1966 donde se le anota:
“General de carácter sereno, suficiente capacidad de trabajo, bastante dedicación profesional y satisfactorio rendimiento”.
Durante el transcurso de la década, declinó respetuosamente otras comisiones fuera del arma de aviación, inclusive invitaciones a participar en la política y el medio diplomático dentro y fuera del país.
En la gráfica se observa al Gral. Alfonso Cruz Rivera conversando con el Gobernador de Jalisco Lic. Alberto Orozco Romero.
XIV. EL RETIRO
Alfonso Cruz Rivera Fue un militar de fuerza aérea quien con 54 años, 5 Meses y 3 días de servicio “Ininterrumpido”, se retiró del servicio activo el 16 de Mayo de 1972 con el grado de General de División Piloto Aviador. Así mismo, tomó una actitud de mucha discreción, haciendo honor a sus ideales y apoyando sus propias convicciones, se abstuvo de participar en eventos de la F.A.M. para no llamar la atención, no distraer al personal de sus actividades y por respeto a los mandos en activo.
Años más tarde, en 1986 la Fuerza Aérea Mexicana al mando del Gral. de Div P.A. Miguel Mendoza Márquez que fue un leal colaborador suyo ocupando grandes puestos; con la aprobación de la Secretaría de la Defensa Nacional y del Presidente de la República Miguel De La Madrid Hurtado, le hizo un reconocimiento en vida al Gral. Cruz Rivera por el gran interés y entusiasmo demostrado durante su carrera militar, destacando su profesionalismo, serenidad y deseo de servir, habiendo creado su propia mística de trabajo, de entrega y de constancia en las diversas actividades y comisiones desempeñadas.
El 16 de Septiembre de 1986 en virtud de la conmemoración de la Independencia de México, la Parada Aérea llevó su nombre.
FUERZA AÉREA MEXICANA
AGRUPAMIENTO AÉREO
GRAL. DIV. P.A. “ALFONSO CRUZ RIVERA”


Como dato adicional, es importante destacar que el Gral. de Div. P.A. Alfonso Cruz Rivera, ha sido el único Comandante en la historia de la Fuerza Aérea Mexicana al que se le ha distinguido con dicho reconocimiento en vida.

El Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos Miguel de la Madrid Hurtado, envío una sentida carta a la familia del Gral. Cruz Rivera con el motivo de su fallecimiento.
Durante su larga carrera militar se hizo acreedor a numerosas medallas y reconocimientos nacionales y extranjeros.
Dentro de la Fuerza Aérea Mexicana al General de División Piloto Aviador Alfonso Cruz Rivera se le recuerda por su vasto historial, en donde su valentía, heroísmo, trabajo y honorabilidad quedaron siempre patentes a lo largo de sus años de servicio a la Patria. Su cercana relación con todo el personal, le permitió conocerlos, evaluarlos y desarrollarlos ampliamente, consiguiendo que le correspondieran con afecto, respeto y admiración. Fue un Comandante que atrajo la simpatía de muchos jóvenes quienes a través de sus ideales alcanzaron un sueño y una carrera.
Basado en el libro Historia Militar del General de División Piloto Aviador ALFONSO CRUZ RIVERA
“CABALLERO DEL AIRE”
Avalado y revisado por la Subsección de Investigación y Desarrollo Histórico de la Fuerza Aérea Mexicana
A-2 E.M.F.A.
DERECHOS RESERVADOS